Nuestro Puerto Rico del Alma

Una vida no es fuerte sino cuando se ha consagrado a conquistar su ideal por sencillo que sea. Eugenio María de Hostos.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

¿Quien dice que los problemas de Puerto Rico se resuelven con la Estadidad?

El 28 de octubre de 2010 el periódico The New York Times publicó el siguiente artículo: “Report Shows Plight of Puerto Rican Youth” en la ciudad de Nueva York. Los resultados son alarmantes para los jóvenes puertorriqueños entre 16 a 25 años de edad, especialmente para los varones. De acuerdo al estudio, conducido por la Community Service Society, una organización sin fines de lucro que lucha contra la pobreza en la ciudad de Nueva York, los puertorriqueños, en particular los varones, son el grupo más alto en desventajas sociales y económicas. Sus niveles de educación y empleo son más bajos en relación a las demás etnias hispanas. Y cito lo que dice:

“Puerto Ricans, particularly males, emerge as the most disadvantaged youth Group in New York City, with rates of school enrollment, educational attainment, and employment lower than any comparable group, including young Black males. Similarly, Puerto Rican women show more challenges than other female youth.”

El giro que le quiero dar a esta nota, que tiene mucha “tela para cortar” y de la cual se pueden hablar muchas cosas, es el siguiente: estos son puertorriqueños que viven la estadidad. Aun viviendo la estadidad, siguen siendo la minoría con desventajas, acarreando la pobreza y todo lo que eso conlleva de generación en generación.

Yo me he cansado de hablar con muchas personas que piensan que la estadidad es la panacea para los problemas sociales y económicos que se viven dentro de Puerto Rico, o para ser políticamente correcta, en el territorio del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, y nadie hasta el día de hoy me ha sabido explicar cómo la estadidad va a eliminar los mismos problemas que viven los hispanos dentro de los estados de la pseudo nación “más poderosa, progresista, y democrática” del continente de Norte América. La pobreza también existe en los Estados Unidos, así también la criminalidad y la deserción escolar, por sólo mencionar algunas cosas nada más.

Los puertorriqueños pobres que viven en los Estados Unidos no salen de la pobreza aún cuando viven dentro de una estadidad. Son otros los factores por los cuales se sigue dentro del ciclo de la pobreza. Por eso la estadidad para Puerto Rico no va a eliminar la pobreza ni los problemas sociales y económicos que se viven en la isla. La población puertorriqueña tiene que romper con esa mentira de que la estadidad, o sea, la unión con los Estados Unidos, es la solución para resolver los problemas. Esa jamás será la solución para los problemas sociales y económicos de Puerto Rico. Puerto Rico “podría convertirse en estado mañana” y aún así seguiría teniendo los mismos problemas.

Dichos problemas sociales no se pueden resolver con una ideología política. Los puertorriqueños tienen que dejar de escoger líderes políticos a base de una ideología política. Al contrario, el pueblo tiene que elegir líderes que de verdad traigan soluciones a base de programas de desarrollo económico, social, y cultural. ¿Hasta cuando el pueblo va a seguir siendo rehenes de unos políticos mediocres que lo único que les interesa es su bien personal y no el colectivo? Los partidos políticos le han hecho un gran daño al país.

Los políticos saben cual es la debilidad del pueblo puertorriqueño y han sacado ventaja para posicionarse en las esferas de poder en el gobierno. El pueblo puertorriqueño es responsable de su propio predicamento, y los Estados Unidos no le van a resolver el problema ni mucho menos con la tan deseada estadidad. Ni siquiera los Estados Unidos ha podido resolver sus problemas de pobreza, criminalidad, y económicos dentro de su patio interior.

Los puertorriqueños tienen que asumir responsabilidad, dejar atrás el miedo y los complejos de dependencia, y madurar como lo hace un joven que ya tiene que tomar en sus manos las riendas de su vida y actuar de forma responsable. De lo contrario, la debacle, que ya se ha ido manifestando, será mucho más devastadora. Esto no se trata de ser independiente, estado, o estado libre asociado. Esto se trata de que cualquiera que sea el estatus político de Puerto Rico ya es hora de trabajar responsablemente por cambiar el rumbo devastador que lleva la sociedad puertorriqueña. No hay que esperar a cambiar un estatus político para empezar a hacer cambios positivos, afirmativos, y asertivos. Lo que hace falta en primera instancia es el gran deseo de progresar, creer en nuestro potencial, y ponerse a trabajar en serio.

2 comentarios:

Kofla Olivieri dijo...

Excelente el escrito, que lastima que el 99% de las personas en Puerto Rico que deberian enterarse de estas noticias no les prestan atencion. Los politicos tiene al pueblo hipnotizado con el mensaje de que la estadidad es la salvacion. Si vieran la pobreza que hay aca en Estados Unidos a lo mejor despertarian de ese engaño.

Don Segundo dijo...

Saludos Kofla,

Hemos estado bien ocupados ultimamente. Poco a poco nos vamos a reintegrar a las blogsfera.

Gracias por el comentario. Eso es asi, la gente se cree que los EU son un paraiso, y son tantas las falacias que se han ccnstruido!

Doña Bianca y Don Segundo