Nuestro Puerto Rico del Alma

Una vida no es fuerte sino cuando se ha consagrado a conquistar su ideal por sencillo que sea. Eugenio María de Hostos.

jueves, 24 de junio de 2010

La Cosa Nostra Puertorriqueña


Eran las 7:00 AM de hoy y estábamos coloquiando sobre los arrestos de Martínez y Bravo.

Interesantemente, los políticos puertorriqueños, especialmente los del Partido Nuevo Progresista, se han convertido en la “Cosa Nostra” puertorriqueña.

La primera foto es un arresto de un miembro de la familia Gambino. La segunda foto es, ¿adivinen quien?, Héctor Martínez. La tercera foto, ¿adivinen quien?, de Juan Bravo, presidente de Ranger America, asesor de la campaña del presente gobernador Luis Fortuño y amigo personal del superintendente de la policía, José Figueroa Sancha y el jefe del FBI, Luis Fraticelli. Ay Dios, que fortuna la de Puerto Rico!


Muy bien lo dijo Carlo Gambino: “Judges, lawyers and politicians have a license to steal. We don’t need one.”

Y ese es el caso de los políticos, tienen licencia para robar y el pueblo les otorga la impunidad cuando los seleccionan cada cuatro años. Estos políticos viven en un mundo de poder, autos, ropa, lujos, restaurantes, viajes, clubes, etc., igualito a la mafia italo-norteamericana (e.g. como las grandes familias Gambino, Genovese, Lucchese, Colombo, Bonanno). Cuando los arrestan, desfilan ante las cortes y los medios de publicidad le dan la publicidad que se merecen. La primera foto es de John Gotti, Jr. La segunda es, ¿adivinen quien?, Héctor Martínez.



Los mafiosos han sido acusados por el gobierno de obstrucción a la justicia, lavado de dinero, soborno, extorsión, entre otros crímenes. Estos son los mismos crímenes que se les acusa a esta estirpe de hombres pertenecientes a la “Cosa Nostra” de los políticos puertorriqueños, donde nuevamente se sobresalta el gran papel del PNP.

El presidente del senado, Thomas Rivera Schatz, aparece en las fotos como el padrino o el “Boss” y los otros políticos que lo siguen son los miembros de la familia político-mafiosa. Juntos acompañan al acusado.



Tantos los mafiosos como los políticos se autodenominan hombres de honor, son los “Honorables” que solo buscan un mismo fin para su “clan” o “familia”: enriquecerse a través del poder y de crímenes. En la siguiente foto se puede apreciar al “soldato” Martínez con el “Capo di tutti capi” Rivera Schatz. A todo el que esté familiarizado con el organigrama de la mafia, entenderá que estos políticos se comportan de la misma forma.



También es interesante que de la misma manera que los mafiosos siguen un estricto código de honor o de silencio, “omerta”, estos políticos lo hacen de igual forma. Claro, tenemos casos de políticos que han roto el juramento de “omerta.” El más reciente caso es el de Jorge de Castro Font. Aquí esta antes y después.




De Castro Font es el Salvatore "Big Pussy" Bonpensiero de los Sopranos.



Escrito por Doña Bianca y Don Segundo.

2 comentarios:

Kofla Olivieri dijo...

Jaja, le quedo bien la comparacion, jaja. Lamentablemente, parece que el pueblo puertorriqueño es masoquista cuando sigue eligiendo a esos mafiosos corruptos.

Prometeo dijo...

Magistral. La comparación es certera en todos los puntos.

Adelante y éxito.